Dormir mal se ha convertido en algo tan común que casi lo hemos normalizado. ¿Cuántas veces escuchamos frases como “no puedo dormir, seguro tengo insomnio”? Pero lo cierto es que no todo problema con el sueño es insomnio.
En consulta veo cada semana personas que llegan convencidas de tener insomnio, pero tras una evaluación adecuada, descubrimos otra cosa: su reloj biológico está desincronizado, su estilo de vida afecta sus ritmos, o simplemente no han aprendido a dormir bien.
¿Qué es realmente el insomnio?
El insomnio verdadero es un trastorno que implica:
- Dificultad para conciliar o mantener el sueño
- Despertarse demasiado temprano
- Y lo más importante: esto ocurre a pesar de tener el tiempo y las condiciones para dormir, y genera consecuencias durante el día (fatiga, bajo rendimiento, irritabilidad, etc.)
Si puedes dormir bien en ciertos horarios, aunque no encajen con tu rutina diaria, es muy posible que no tengas insomnio.
¿Y si el problema es tu ritmo biológico?
Aquí es donde entra un diagnóstico poco conocido pero muy común: los trastornos del ritmo circadiano.
Nuestro cuerpo funciona con un “reloj interno” que regula los ciclos de sueño, temperatura corporal, apetito y muchas otras funciones. Este ritmo natural dura aproximadamente 24 horas y se sincroniza con la luz, la oscuridad, las rutinas, y el entorno social.
Cuando este reloj se desajusta, aparecen síntomas que se parecen al insomnio, pero no lo son.
Ejemplos comunes
- Retraso de fase: no puedes dormir antes de las 2 o 3 de la madrugada, pero dormirías perfectamente si tuvieras que levantarte al mediodía.
- Avance de fase: te da sueño muy temprano y te despiertas de madrugada, descansado pero desfasado respecto al mundo.
- Desajuste por turnos o jet lag: tu cuerpo no logra adaptarse a cambios de horario.
- Uso excesivo de pantallas por la noche: la luz azul retrasa tu reloj biológico.
¿Por qué es importante saberlo?
Porque el tratamiento del insomnio y el de los trastornos circadianos no es el mismo. Tratar un problema de ritmo como si fuera insomnio puede frustrarte, cronificar el problema o llevarte a usar medicación innecesaria.
En cambio, con un diagnóstico adecuado, podemos ayudarte con:
- Terapia de luz (fototerapia)
- Melatonina en horarios personalizados
- Técnicas de higiene del sueño adaptadas a tu caso
- Reprogramación progresiva del horario de sueño
Conclusión: No todo es insomnio
Dormir mal no siempre significa insomnio.A veces, simplemente estás intentando dormir a una hora que no le conviene a tu reloj interno. Y eso tiene solución, si sabes por dónde empezar.
Si tienes dudas, agenda una cita y lo hablamos. Un buen diagnóstico cambia todo.